El Santísimo nombre de María

El nombre de María, es nombre de salvación para los regenerados, señal de todas las virtudes, honra de castidad; es el sacrificio agradable a Dios; es la virtud de la hospitalidad; es la escuela de santidad; es, por fin, un nombre completamente maternal (San Pedro Crisólogo).

¿Quiere vencer las tentaciones?

¿Reacción «oso polar» u «oso negro»? La elección está en sus manos… Pero tal vez le ayude leer primero este artículo.

La omnipotencia del verdadero amor

Los que militan en las sendas de la fe como buenos soldados de Cristo deben permanecer continuamente alerta, a fin de vencer a los enemigos de la salvación. Para ello, no hay arma más temible que el verdadero amor fraterno.

«Ecclesia semper sanctificanda»

La Iglesia despuntó del ímpetu evangelizador de su fundador, Jesucristo, que le confirió a los Apóstoles el poder de expulsar demonios, curar enfermedades y, sobre todo, proclamar el Reino de Dios (cf. Lc 9, 1-2). El último discurso del Redentor a sus discípulos, a manera de corolario de su misión, fue la contundente convocatoria al apostolado universal: […]

Más bella, más vigorosa, más pura

Cuando la Iglesia aparece sacudida por una salvaje tempestad, entonces es cuando emerge más bella, más vigorosa, más pura, refulgiendo en el esplendor de las mayores virtudes.

Nuestra Señora Reina

En medio al júbilo de toda la corte celeste, el Padre Eterno la coronó, comunicándole la omnipotencia de la súplica, el Hijo, la sabiduría; y el Espíritu Santo el amor.

Revolución y contrarrevolución en el arte sacro

Al principio Dios creó el cielo y la tierra y discernió que el conjunto era «muy bueno» (Gén 1, 31) o bello, según una posible traducción del texto griego. De hecho, modeló el universo con dedos de artista (cf. Sal 8, 4) y lo coronó de «gloria y dignidad» (Sal 8, 6). La obra prima […]

Casa de Dios y Puerta del Cielo

¿Quién, de entre los hijos de Adán, está exento de defectos? Taras físicas, lagunas morales, deficiencias de carácter… A alguna debilidad, ¡todos están sujetos! Todos, excepto María.

El sacerdote perfecto

Desde la expulsión del paraíso hasta la venida del Redentor, la humanidad vislumbra en figuras imperfectas al Pontífice absoluto, de cuyo poder mediador participarían todos los sacerdotes de la Nueva Ley.