
Hace cien años, Nuestra Señora se apareció en Fátima trayendo un mensaje de conversión para toda la humanidad. Con amor filial, los Heraldos del Evangelio organizaron una Solemne Celebración conmemorativa de las apariciones de Nuestra Señora Fátima.
Con una Misa solemne, los fieles se reunieron después fuera de la Iglesia del Buen Pastor para el rezo del Santo Rosario a lo largo de las calles.
Una manifestación pública de nuestro deseo de que se cumplan las peticiones y promesas de Nuestra Señora.


